◈ ━━━━━━ ⸙ Enséñame ⸙ ━━━━━━ ◈

╘C╛╘a╛╘p╛╘í╛╘t╛╘u╛╘l╛╘o╛ ╘8╛╘8╛

¿Qué? Mara me dijo que no le diría nada. Por un momento la mirada de las tres se fijaron en mí. Después Bia y Chiara miraron a Mara.

Bia: ¿Vos sabés que le pasa?

Mara: por supuesto.

Bia: bien, pues… No me interesa.

Mara: ¿Disculpa?

Bia: no, no te disculpo.

Mara: ¿En verdad no te interesa él?

Bia: no me interesa nada que digas vos. ¿Ponerte a hablar sin pruebas? Yo no escucho esas cosas.

Mara: está bien –me miró–. En unos días vendrás desesperada a preguntarme.

Bia: soñás mucho.

Mara me miró por última vez y se fue. ¿Qué fue todo eso?

Bia me miró seria y continuó caminado. Yo la seguí.

Manuel: espera.

Bia: ahora no, Quemola –está enojada.

Manuel: Chiara déjame con ella.

Bia: ni siquiera lo pienses.

Chiara: me quedo.

Manuel: ¿En verdad vas a dejar que algo que hizo Mara te haga enojar?

Bia: para nada –sonrió–. Necesito un pequeño favor.

Manuel: ¿Qué necesitas? –miró a Chiara.

Bia: pon esto en la mochila de Mara –¿Qué? –. Escuché que hoy iban a hacer revisión de mochilas.

Manuel: la cámara me puede ver.

Bia: yo iré a la dirección. Será fácil hackear las cámaras. ¿Qué decís?

Manuel: está bien –tomé el frasco.

Bia: abre el frasco –lo abrí. No tenía nada–. ¿Ya me vas a decir que tenés?

Manuel: no…

Bia: aceptaste sin titubear. Cómo si sintieras que debes hacer todo lo que yo te diga. ¿En verdad crees que te enviaría a vos a hacer eso? Enviaría a un aliado. No a mi novio.

Chiara: debo irme…

Bia: andá Chiara, podés irte –se fue.

Manuel: me siento culpable por lo de tu rodilla.

Bia: está bien. Lo descubriré tarde o temprano – comenzó a caminar–. No me ayudes hoy, Matteo lo hará.

Se fue. Bia es muy inteligente, no le podés ocultar nada. La reina de la mentira siempre sabe cuándo le mentís.

Matteo: ¿Y Julio te ha dicho algo?

Bia: no.

Luna: ¿No sabe?

Bia: exacto.

Matteo: ¿Y cómo estás segura?

Bia: es mi cómplice –se miraron.

Luna: es la primera vez que…

Bia: ¿Escuchan esa palabra de mí? –asintieron–. Necesitas un requisito muy importante para ser mi cómplice.

Matteo: ¿Cuál?

Bia: no se los diré. Ser mi cómplice es lo peor que podés ser.

Luna: ¿A qué te referís?

Bia: pregunten le a Manuel como tema de conversación. Julio cambió conforme me fue conociendo. Es más, ¿Recuerdan como era antes del baile?

Matteo: a cambiado desde ese día.

Luna: ¿Lo convertiste en tu cómplice ese día?

Bia: son muy inteligentes –escuché el claxon–. Mi mamá –me ayudaron a levantarme–. Cualquier cosa de Quemola me avisan.

Me ayudaron a subir y me despidieron.

Alice: ¿Y Manuel?

Bia: decidí que hoy se fuera temprano.

Alice: ¿Se pelearon?

Bia: una pequeña diferencia.

Alice: ¿Todo estará bien?

Bia: soy Beatriz Urquiza, todo siempre está bien.

Miré hacia la ventana. Descubriré que le pasa a Quemola. A mí no me pueden ocultar nada.

Hoy es mi presentación con Manuel. Estuve ensayando demasiado con él es estos días y espero que todo salga bien.

Manuel: ¿Listo?

Jhon: por supuesto.

Manuel: espero y Bia ya no esté enojada.

Jhon: solamente vos te metes en estas cosas. Vos decidiste estar con ella.

Manuel: yo la quiero.

Jhon: cuando llegaste no decías lo mismo.

Manuel: cállate. Nadie puede enterarse.

Jhon: es curioso que todo haya sucedido por ello. Me lo dijiste el año pasado, ¿Lo olvidas?

Manuel: claro que no lo olvido. Ahora estoy con ella y soy feliz.

Jhon: ¿En verdad? ¿Sos feliz con todos los secretos de tu novia?

Manuel: ¿Querés que comencemos a hablar de relaciones tóxicas? Porque puedo comenzar con las misteriosas marcas de Celeste en su brazo.

Jhon: ¿De qué hablas?

Manuel: no se le puede ocultar nada a Bia.

Jhon: de nuevo ella –dije enojado. Me molesta que se meta en mi relación.

Manuel: no está bien lo que hacés.

Jhon: yo no hago nada.

Manuel: ¿Seguro?

Celeste: hola –dijo llegando con Bia.

Jhon: ¡Celeste!

Manuel: Bia…

Bia: ¿Me acompañas al baño, Celeste?

Celeste: claro. Nos vemos. Suerte con la presentación.

Jhon: gracias.

Se fue sin hacerle caso. Bufó.

Jhon: ¿Qué harás?

Manuel: tengo un plan.

Prefecto: es hora de su presentación.

Nos miramos y asentimos. Vamos a cantar y a ser la mejor presentación de esta semana cultural.

:musical_keyboard: No pienses más, que todo anda mal :musical_keyboard:

:headphones: Tira pa' adelante, que la vida es una y tienes que brillar

Ya deja el temor

Y sácalo hoy :headphones:

:musical_keyboard: Que nada es perfecto, pero si lo intentas todo irá mejor

No tengas miedo

Que aquí estoy yo

No tengas miedo

Inténtalo :musical_keyboard:

:musical_keyboard: :headphones: Todo vuelve

La vida te lo devuelve

Te regala mil momentos

Que llevas en el pensamiento

Todo vuelve

La vida te lo devuelve

Te regala mil momentos

Que llevas en el pensamiento :headphones: :musical_keyboard:

:musical_keyboard: Todo vuelve

La vida te lo devuelve

Te regala mil momentos

Que llevas en el pensamiento :musical_keyboard:

:musical_keyboard: :headphones: Todo vuelve

La vida te lo devuelve

Te regala mil momentos

Que llevas en el pensamiento :headphones: :musical_keyboard:

Todos comenzaron a aplaudir. Una que otra chica a gritar pero a mí sólo me interesaba Celeste.

Bajamos del escenario y cada uno se fue con su novia.

Manuel: ¿Ya no estás enojada?

Bia: tendrás que comprarme un helado, pero ya no.

Reímos.

Matteo: muy buena presentación.

Gastón: me gustó mucho.

Nina: ¿Qué podía esperar de mi mejor amigo?

Chiara: digo lo mismo, ¿Verdad Jhon?

Julio: muy bien hermano. Jhon.

Guillermo: estuvieron increíbles.

Celeste: me gustó mucho.

Jhon: gracias chicos.

Manuel: me alegra que les haya gustado. Ahora… ¿Por qué no me dijiste que estaban tus papás aquí? Literalmente estaba frente a ellos cuando me subí a la barra.

Bia: nunca me dijiste que lo harías.

Manuel: vamos con ellos. Nos vemos.

Jhon: nosotros vamos a hablar, ¿Verdad?

Celeste: si.

Matteo: no se pierdan.

Jhon: ¿Qué?

Matteo: nada.

Rieron y nosotros también. Nos fuimos abrazados al patio y comenzamos a platicar.

Celeste: ¿Cómo vas con tu papá?

Jhon: todo sigue igual.

Celeste: deberías pedir ayuda.

Jhon: ya hablamos de eso Celeste.

Celeste: pero no podés dejar que te siga golpeando.

Jhon: Celeste, no vamos a hacer nada.

Celeste: yo me preocupo por vos.

Jhon: ¡Te dije que no!

Retrocedí dos pasos. Yo solamente quiero que Jhon entienda que esto con su papá no puede seguir así. Nunca fue mi intención que se enojara.

Bia: ¿De nuevo marcas en las muñecas?

Celeste: yo no tengo nada.

Bia: quítate el suéter.

Celeste: ¿Qué?

Bia: hacé lo que te digo. No querés que lo haga yo ¿Verdad?

Celeste: estás en muletas.

Bia: ¿Y quién te dijo que eso me detiene? Quítate el suéter.

Hice lo que me dijo y se vieron todos los moretones que he estado ocultando.

Bia: ¿Todo eso te ha hecho Jhon? Celeste, esto no puede seguir así.

Celeste: no entendés porque lo hace.

Bia: no me interesa. Si dejas que te vuelva a golpear tarde o temprano terminarás en el hospital. No es por mí, es por vos. Abrí los ojos Celeste, Jhon solamente te hace daño. Tené dignidad y deja a Jhon de una vez por todas.

Bia tiene razón. No puede dejar que vuelva a ponerme una mano encima. Debo ponerle un punto final a esto.

Celeste: tenés razón, ya no me va a interesar lo que te pase, y tampoco dejaré que vuelvas a golpearme.

Jhon: ¿De qué hablas?

Celeste: Bia tiene razón, esto tengo que hacerlo por mí, debo tener dignidad.

Jhon: ¿Qué tiene que ver Bia?

Celeste: ella me ha hecho abrir los ojos. Jhon, vos y yo terminamos.

Jhon: ¡No! ¡No me podés dejar por ella! –miré a la derecha y ahí estaban todos los chicos–. ¡Dejá de hacer todo lo que te dice ella! –miré a Bia.

Celeste ¡Es por mí, no es por ella! ¡Vos y yo terminamos!

Me sentí tan bien al decir eso. Siento que me he liberado de todo esto. Al fin soy libre.

Me di la media vuelta pero sentí que me jaló del brazo y sentí un fuerte en mi cara. Caí al suelo golpeando me la cabeza con la banca que estaba en el camino y todo se volvió negro.