Playa y Desgracias 2

Bienvenidos a la parte 2! No tengo mucho que decir, más que gracias por que a la otra parte no le fue tan mal, aquí les dejo el link de la otra parte. Capitulo 1 y también el link directo de la historia en wattpad, ahí primero se publican los capítulos Playa y Desgracias en wattpad hay otras historias de one piece si les interesa!

#PlayaYDesgracias

Ace trago saliva por los nervios.

—B-bueno, tal vez la entrada es gratis—Menciono mientras que con sus manos temblorosas sujeto el folleto y lo abrió.

En letras grandes, en mayúsculas y rojas decia "ENTRADA GENERAL: 700 pesos por persona (Solo incluye a la alberca principal) ENTRADA ESPECIAL: 5,000 pesos por noche ( a todas las albercas menos las VIP, a cabañas o suites, se paga aparte) ENTRADA VIP EXCLUSIVE: 20,000 pesos (todo incluido, mas restaurante, jacuzzi, descuento en masaje y spa) ENTRADA A LA PLAYA: 500 por personas (Se paga aparte)

Casi se le salen los ojos de la impresión, eso... era mucho, demasiado dinero.

Sabo también habia leido los precios, aunque su reacción no fue tan exagerada, se sentia igual que su hermano mayor en el fondo.

—Luffy...—Menciono el rubio mientras timidamenete rascaba su cabeza

—¿Podemos ir?—pregunto con su tipica inocencia desconociente del tema, estas palabras fueron acompañadas por unos ojos grandes llenos de brillos y una mueca triste; era totalmente incosiente de la cara que tenia en ese momento, pero, para sus hermanos era una tentación, era tan adorable

El rubio no completo su frase, se quedo sin palabras de un momento al otro, hasta que después de unos incomodos minutos decidió hablar.

—Bu-bueno podemos ahorrar para... poder ir...

—¡YEEEEEY!—luffy grito de la emoción

Mientras que el de pecas solo lo fulmino a su hermano menor con la mirada.

—Deberiamos ahorrar para pagar lo necesario, pero no para unas vacaciones, Sabo—le susurro cerca del oido, el contrario no hizo mas que ignorarlo y seguir viendo al menor de los tres celebrando con euforia—No me ignores—le jalo de la oreja

El de tez clara volteo, y le digo con una sonrisa falsa.

—Cumplirle un capricho no afecta—y, tan solo al completar la frase, sintio como le jalaba con más fuerza, le dolía, pero, prefirió aguantarse

—Sabo, no tenemos ese dinero, solo de la entrada general para los tres nos costaría 2,100, es más de la mitad de el dinero que tenemos SOLO para la semana

Ace estaba preocupado, mientras que, Sabo también pero no era tan obvio, y por el otro lado, luffy seguia gritando, estaba tan en su mundo que nisiquiera vio a sus dos acompañantes hablar entre si.

—Podriamos crear dos cuentas, una para ahorrar para las vacaciones y otro, para conseguir el dinero de la luz y el departamento, tampoco es que tengamos que pagar las vacaciones para mañana—menciono un tanto nervioso. Le dio tres ligeros golpes a la mano de ace, para que le soltara la oreja, cual cosa el de pecas no hizo.

El moreno alzo la ceja, no era tan mala idea, pero, se le habia ocurrido una mejor, aunque era consiente de que luffy nisiquiera les estaba viendo, se acerco a sabo y le susurro al oido una idea.

Sabo, en respuesta, únicamente asintió, no era mala idea.

—¿Quién le dice?—Pregunto el rubio

—Yo le digo, no te preocupes—hizo una pequeña pausa para mirar adelante—Luffy, tenemos que hablar contigo

Inmediatamente paro de saltar y les presto atención, aunque seguía parado.

—¿Qué sucede?

—Luffy...—Ace suspiro—Si realmente quieres ir a ahí, nos ayudarás a reunir dinero

Hubo un pequeño de silencio.

—¡Sí, claro!—gritó mientras estampaba sus manos en la mesa del comedor

—¿Sabes a que nos referimos, verdad?—Pregunto el de tez blanca

—¿A qué?—Pregunto mientras ladeaba la cabeza

—Tendrás que trabajar—hablaron los dos hermanos mayores al unísono, preocupados por su reacción estaban, así que lo miraban fijamente para ver cualquier indicio qué les anticipara una respuesta clara

Luffy se quedo unos momentos analizando la situación; en su cabeza sonaba como qué, si hacia algo tendría una recompensa, y lo que tenía que hacer era ganar dinero y se irían de vacaciones. No sonaba tan mal, era un trato justo.

—¡Sí! Esta bien

Ambos suspiraron, había salido mejor de lo que pensaron.

—Bueno—carraspeo un poco

El mencionado dirigio la mirada a su hermano rubio y dejo que continuara.

—Tendrás que conseguir un trabajo de medio tiempo o hacer entregas

Asintió con emoción.

—¡si! Haré entregas, será más rápido que buscar un trabajo formal

—Bueno, entonces estará decidido, cada hermano pondrá de su parte, luffy trabajará, sabo hará horas extras al igual que yo—Menciono el moreno con orgullo, sería un plan infalible

Y, así fue como, empezó la semana super ahorrativa, lo primero que hicieron el lunes, fue abrir las dos cuentas, de quien eso se encargo sabo.

Eso fue lo más ligero, lo más pesado fue lo que siguio, lo cual fue, cortar sus lujos o cosas que coleccionaban, ya que cada hermano tenía su obsesión, sabo con sus productos de skin care y maquillaje (todo el baño del departamento estaba lleno de estos) Ace con sus cómics y luffy con sus compras impulsivas de comida.

Todo eso lo cortaron, fue un infierno para ellos, justo esa semana a sabo se le agotó el corrector, y ya no podía tapar su cicatriz, A luffy no llenaba la comida de la casa y, estar repartiendo comida todo el día le daba aun más hambre, y ace, no le quedaba más que ver su lista de deseos de cosas que quería comprar.

De igual manera, Ace redujo las porciones de comida de todos, para estirar la comida más que pudiese.

Aparte, el monito se quedaba casi todo el día solo, ya qur después de terminar sus entregas, sus hermanos llegaban hasta la noche.

Y así fue su rutina durante una semana y, así se mantuvo hasta la otra.

Hasta que por fin llego el último día del mes, donde todos preocupados se sentaron alrededor de la mesa y solo observaban como es que ace hacia todos los cálculos, esperando impacientemente a que les dijera que si podían pagar lo necesario de este mes y si podrían irse de vacaciones.

Todos estaban sudando frío, sabo jugaba nervioso con sus dedos.

Mientras que ace sostenía la calculadora mientras le temblaba la mano y escribía torpemente, hasta que por fin llego al número final.

—la verdad es que...