<img src="https://sb.scorecardresearch.com/p?c1=2&amp;c2=22489583&amp;cv=3.6.0&amp;cj=1">

:sailboat: • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •

Author's Avatar
Jatsurie 04/03/23
455
4

• ──────────────────────────── •

 :sailboat:  • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •-[b]
[B]
[B]
[B]
[C] • ──────────────────────────── • 
[C] 
[IMG=0X0]
[C]
[C]H

Hoy les traigo un blog para la quinta prueba

del evento de Miss All Blue. En esta ocasión

relataré cómo vivió Nami cada prueba del

concurso a través de un fic. Vamos con ello.

• ──────────────────────────── •

 :sailboat:  • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •-[b]
[B]
[B]
[B]
[C] • ──────────────────────────── • 
[C] 
[IMG=0X0]
[C]
[C]H

—Damas y caballeros, ¡damos por concluido el día de hoy! Mañana nuevamente nos reuniremos en el anfiteatro para la siguiente prueba de este fabuloso certamen. ¡Buenas noches a todos!

El presentador apagó su micro, las luces que iluminaban el plató también dejaron de resplandecer, el público se levantó de sus asientos dirigiéndose hacia la salida y, las señoritas que hace poco se encontraban de protagonistas del certamen, dejaron aquel plató para ir a sus camerinos. La prueba de talento del día de hoy había concluido.

Un andar resonaba en dirección hacia los camerinos, aquellos tacones rojos casi pisan la cola del vestido negro que hace poco se apreció en la prueba de la noche. Nami llegó a su camerino, abrió la puerta y la aventó con fuerza contra la pared. Se sentó frente al tocador, mirando su rostro en aquel espejo rectangular con el marco iluminado por bombillas de luz blanca.  Tenía los brazos cruzados y lucía una expresión entre el enojo y la frustración.

—¿Cómo es posible que haya quedado segunda? —Le preguntó a su yo del espejo con un tono de indignación. Sin encontrar respuesta, se levantó del banco y se dirigió al otro espejo de la habitación, uno más grande donde podía ver su cuerpo completo—. ¿Acaso no los he deslumbrado con mi traje? —Colocó su mano derecha en su cintura, giró un poco su cuerpo mostrando aquel corte que tenía el vestido en la espalda y sonrió para sí misma—. Realmente me queda bien.

Contempló su hermosa figura por varios minutos más. Había seguido un régimen estricto de dieta y ejercicios para resaltar cada parte de ella. Sin embargo, sabía que el certamen no se centraba solo en eso, también tuvo noches donde estudió y practicó el diálogo frente al público para dar sus respuestas sin sonar como una chica mandona.

—Puff. Al parecer responder correctamente las preguntas sí era importante. Creí hacerlo bien, pero la he cagado. —Soltó un pequeño suspiro antes de alejarse del espejo y dejarse caer nuevamente en el sillón.

Los pensamientos de Nami se dirigían hacia la razón de por qué estaba participando en el certamen, estaba relacionado con su infancia y con Bell-mere. El recuerdo se remonta a una tarde donde la pequeña pelinaranja encontró una fotografía de su madre adoptiva cuando era muy joven y aún no se había enlistado en la Marina. En la parte baja de la foto había  una nota: certamen de belleza. Después de analizar la foto, los ojos de Nami resplandecieron y esbozó una gran sonrisa. No se debía a que Bell-mere lucía un hermoso vestido donde por encima le colgaba una bandana que decía ‘Primer Lugar’, ni que sostenía un gran ramo de rosas rojas. La razón de su sorpresa y emoción es lo que el presentador le entregaba a Bell-mere en sus manos: un gran cheque de quinientos millones de berries. Nami había descubierto que podía ganar dinero en esos certámenes y así, volverse aún más rica. Para ella era una manera de obtener dinero rápido ya que solo debía presentarse y dejar que su belleza cautivara al jurado y al público, o eso creía. Años después descubrió que se necesita entrenamiento, destreza, habilidad y mucho más que solo el físico, pero nunca dejó de soñar en ganar ese gran cheque.

—¡No voy a dejar que mi esfuerzo sea pisoteado tan fácilmente! —. Se paró del sillón con una actitud diferente y dispuesta a seguir adelante —¡No permitiré que nadie más gane ese premio! ¡Esos berries son míos!

La puerta se abrió de un gran golpe y dos siluetas entraron al camerino.

—¡Nami! ¡Te estábamos buscando! —Una voz conocida la asustó por detrás.

—¿Dónde te habías metido? Llevamos un buen rato esperándote en las bancas.

—¡Chopper! ¡Usopp! ¡Qué bueno que están aquí!  —. Sus amigos habían llegado a su camerino, Nami no pudo contener la alegría de verlos y fue a abrazarlos —. ¿Qué tal les pareció? ¿Me grabaron? —. Chopper alzó una cámara de vídeo y asintió. Nami soltó una risa pícara, ya había visto la cámara pero esperaba su confirmación.

—Al igual que los otros días, tengo todo aquí—. Chopper se tomaba muy en serio su rol de filmar y ser camarógrafo —. ¿Quieres ver?

Los tres Mugiwaras tomaron lugar en la pequeña sala del camerino, encima de aquellos pufs bastante cómodos con el logo del certamen. Usopp conectó la cámara de video al televisor para que todos puedan apreciar aquellas escenas del concurso. La primera silueta en aparecer no fue la de Nami, sino la del pequeño doctor que anunciaba el inicio de su filmación vistiendo un conjunto elegante para la ocasión.

—Eh, Chopper, ¡qué bien te queda eso!—. La pelinaranja se asombró del compromiso que mostró su nakama para la filmación.

—Ni creas que diciendo eso me harás feliz, cabrón—. El pequeño se sonrojó por unos instantes hasta que recordó a qué había ido al camerino.

—Mejor empecemos de una vez porque sino…—. Usopp sintió la mirada fija de Nami en él y en el pequeño. Chopper corrió rápidamente a su asiento y continuaron viendo el televisor.

—¡Ahora viene lo bueno! ¡El primer día del concurso!

 :sailboat:  • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •-[b]
[B]
[B]
[B]
[C] • ──────────────────────────── • 
[C] 
[IMG=0X0]
[C]
[C]H

Todas las concursantes fueron llamadas al plató para su presentación general y el anuncio de la primera prueba: Canto. Nami había practicado semanas antes especialmente para esta prueba. La canción la había estudiado y repasado con ayuda de Brook quien la acompañaba con un instrumental muy hermoso. No tenía una excelente voz con la cual llegar a los agudos, pero sí la confianza de salir al escenario y dar lo mejor de sí. El primer día, en lugar de sentirse nerviosa, estaba emocionada. Por fin había llegado al inicio de cumplir una de sus metas: obtener esos quinientos millones de berries. A la pelinaranja se le designó el número siete de entre los catorce participantes. Las luces se apagaron y el presentador dio un gran discurso antes de que la prueba diera inicio. En pocos minutos fue llamada la primera participante, pertenecía a la Marina, nada más y nada menos que Tashigi. Ella lucía nerviosa y casi se tropieza antes de llegar al plató y sostener el micrófono. El público aguantó un poco la risa pero, segundos después, fueron callados al escuchar su dulce voz a través de una canción triste.

—Tashigi sorprendió a todos, fue un buen primer inicio.

—Es verdad, su voz calmó los nervios de varias concursantes.

—Sonaba muy bien, pero ni así pudo ganar la prueba. —Nami soltó enojo en aquellas palabras. Sus nakamas murmuraban mientras sus miradas estaban encima de ella —. Hagan silencio, quiero seguir viendo.

Después de los calurosos aplausos de la presentación de Tashigi, continuaron saliendo las participantes de a pocos. Cada una tenía algo de especial, su estilo, su tono, la canción que había escogido y su presentación. Finalmente llegó el turno de la navegante.

—¡Nami, luces preciosa! —Chopper hizo un zoom al rostro de Nami. Su piel brillaba por los mismos reflectores y mostraba una mirada determinada y dispuesta a ganar.

—Sí, se te notaba muy segura. ¡Eso fue lo que atrapó a los jueces!

La cámara la siguió hasta que llegó a sostener el micrófono en sus manos. Nami lucía un vestido color dorado muy brillante y corto que dejaba poco a la imaginación, todo era parte de su plan. El presentador anunció su nombre y la categoría que escogió para cantar: pop. Minutos después, una música alegre y de mucho dinamismo invadió el anfiteatro. Y entonces, empezó la locura. Cuando Nami empezó a cantar, el público enloqueció al instante. La canción que había escogido era muy conocida y contagiosa, como las de Uta. Con solo escuchar la intro, las personas se levantaron de sus asientos mientras disfrutaban el ritmo y tarareaban la letra al compás de la voz de Nami. Ella, como lo había practicado, no solo se centró en el canto, sino en dar todo un espectáculo donde las personas pasen un momento que no puedan olvidar fácilmente.

La pelinaranja caminaba por el filo del plató mientras movía sus caderas como Shakira. Realizaba gesticulaciones con sus manos que iban acorde al ritmo de la canción mientras sus dedos recorrían su cabello, cintura, y el mismo vestido. Cada movimiento encantaba al público donde podías ver los ojos de la gente siguiendo la silueta de la navegante. Sus expresiones eran vívidas y contagiosas, cada vez que soltaba una sonrisa o guiñaba un ojo el público gritaba aún más por ella. La primera fila del público ya estaba de pie y estiraba sus manos para intentar tocar su mano y ver si en algún momento les hacía caso. Sus movimientos de baile dejaba embobados a los hombres y mujeres. Mientras la canción avanzaba, las personas empezaron a concentrarse más en la primera fila, los asientos del anfiteatro estaban entre vacíos y con personas subidas en ellos. Como acto final, Nami realizó un vibrato increíble mientras inclinaba levemente su cabeza y estiraba su brazo hacia atrás. Cuando dejó de cantar agradeció al público con una gran sonrisa y se retiró con una expresión triunfante.

El presentador anunció su retirada pero las personas querían seguir escuchándola, algunos de ellos intentaban subirse al plató así que los de seguridad tuvieron que intervenir para que no se vuelva una situación caótica.

—¡Fue una locura total tu presentación! —Usopp seguía emocionado de volver a ver la presentación de su nakama.

—A mí casi me pisan  Las personas detrás mío me empujaban queriendo llegar al plató. Tuve que transformarme para que dejaran de hacerlo —recordó el pequeño Chopper—. Pero, ¡Brillaste! Nosotros nos emocionamos mucho ¡Aplaudimos como nadie!

—¿Qué te puedo decir? La verdad fue increíble —. Nami soltó una risa de vanidad por tales halagos mientras tiraba su cabello hacia atrás.

—Así es, con ninguna otra presentación el público enloqueció de tal mane…—Usopp no pudo terminar la frase, sí hubo alguien que sorprendió aún más al público.

Después de la presentación de Nami, el resto de chicas parecían intimidadas. Todas aquellas que salían al plató cantaron, pero no emocionaron al público. Las personas no hacían más allá de aplaudir y mirar a la participante de turno. Nami sentía que tenía esta primera prueba en la bolsa, podía imaginarse cómo poco a poco estaba recibiendo ese gran cheque, su felicidad se veía reflejada en su rostro y en su mirada llena de seguridad. Solo quedaba una participante por salir a escena, era una chica que no había visto nunca. El presentador la llamó por el nombre de Caty y el género que escogió fue ópera. La chica de cabello y vestido del mismo color se dirigió al micrófono. Las luces se apagaron por completo y solo quedó un reflector iluminando la silueta de la joven.

La música empezó a sonar, no era una canción sino una melodía. Caty cerró los ojos y, en cuanto abrió sus labios para cantar, el público quedó estupefacto. Todas las miradas reposaban en aquella joven con una voz tan maravillosa e irreal que nadie creería lo que podía llegar a pasar. Las personas no decían palabra alguna, ni el público ni los jueces. El ambiente transmitía una sensación de paz, pero sobre todo, iración y respeto por aquella joven. Lo único que se escuchaba era su voz, aquella voz que los atrapó y los sumergió en un mundo más allá de las paredes del anfiteatro. Ella y su voz eran majestuosas. Algunas personas comenzaron a llorar, podría ser de alegría o tristeza o por sentir algo inexplicable en el corazón. Cuando ya estaba por terminar la presentación, las personas empezaron a pararse poco a poco intentando hacer el menor ruido posible, no querían interrumpir tan sublime acto de presencia. Caty terminó de cantar y nadie aplaudió en ese momento, pero el rostro del público mostraba satisfacción de haber presenciado esto. Segundos después de que acabó el trance, los aplausos llenaron toda la sala, vociferaciones de alegría y agradecimiento. Incluso el presentador también terminó conmovido. Nami tomó el control del televisor y pausó la filmación.

—Hubiera ganado la prueba de no haber sido por ella —replicó con enojo hacia sus nakamas. Ellos no sabían qué decir para cambiar su estado de ánimo, sabían que cualquier palabra mal dicha ocasionará un golpe en sus cabezas.

—A mí me gustó mucho más tu presentación, eh, Nami —dijo Usopp intentando acabar con la tensión del momento.

—Es verdad ¡Solo tú ocasionaste que el público cantara contigo! —Chopper intentaba que se le pasara el enojo a su nakama—. ¡Diste un show digno del certamen! Yo canté toda la canción contigo, Nami. —el pequeño soltó una sonrisa que pareció calmar a la navegante.

—Sí, esos jueces están mal. Yo sí di un espectáculo —se levantó del puff y empezó a caminar hacia el espejo—. Es verdad que no llegué a un timbre tan alto, pero podía haber ganado. ¡Causé furor! ¿No es así? —preguntó a sus nakamas quienes asintieron rápidamente.

Nami empezó a ver nuevamente su silueta en aquel espejo, su mirada barría desde sus pies hasta su cabello. Pronto, una sonrisa se dibujó en el rostro de la navegante.

—Mejor vamos con la segunda prueba, ahí es dónde sí reconocieron mi talento —. soltó una pequeña risa al recordar el resultado de ese día.

—Uff, la segunda prueba, ¿cómo olvidarlo? —dijo Usopp agarrándose la cabeza al recordar ese momento —Pero lo manejaste muy bien.

Nami regresó con sus nakamas y se sentó dispuesta a continuar viendo la filmación.

—¿Aquí también luces un traje acorde a la prueba, Chopper? —dijo con un tono sarcástico.

—¿¡Eh!? ¿¡Cómo crees eso, Nami!? —el pequeño reno replicó indignado por la pregunta —Sigo con mi traje elegante, ya lo verán.

 :sailboat:  • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •-[b]
[B]
[B]
[B]
[C] • ──────────────────────────── • 
[C] 
[IMG=0X0]
[C]
[C]H

Después de aquella primera prueba varias de las concursantes le habían puesto un ojo encima a Caty. Si bien era hermosa como cada una de las seleccionadas, el talento y la presentación que mostró en el escenario era irable y de tener en consideración como una rival digna en la competencia. Por otro lado estaba Nami quien en lugar de sentirse intimidada quería que ya empiece la siguiente prueba para demostrarle a Caty que ella es quien va a ganar este certamen. Había despertado su sentido de la competitividad, estaba más decidida a superar cada prueba y pisotear las esperanzas de las demás chicas, en especial la de Caty. El anuncio del inicio de la segunda prueba sonó por los altavoces y las participantes empezaron a salir de los camerinos. Todas ellas iban tapadas por una bata fina de tul muy delgada con el logo del certamen en la espalda. La fila de participantes que se iba formando se hacía más larga mientras llegaban a la antesala del plató. Todas mostraban sus piernas perfectamente estilizadas, desnudas y sobrepuestas en tacones muy altos. Las chicas estaban más que listas para la segunda prueba de la noche: traje de baño.

Nami estaba muy cómoda para esta prueba, su cuerpo bien tonificado sería el estelar esta noche. Además, estaba emocionada de poder estrenar un bikini que mandó a realizar a una diseñadora muy famosa del Nuevo Mundo: Jatsurie. Tres meses antes de que empiece el concurso, Nami llegó a la sede central de su tienda para hablar en privado sobre el diseño de su traje. Ambas se sentaron en el gran salón de experimentación, aquí se mostraba telas de distintos colores, texturas, grosores e incluso se podía imprimir los patrones diseñados en el momento para que el cliente no espere a los días posteriores a ver cómo queda en la tela. Después de una larga conversación y una lluvia de ideas en conjunto, el diseño en boceto del bikini terminó de hacerse en una tarde. Nami quedó más que satisfecha con la visión de lo que llevaría puesto, en especial porque sentiría a Bell-mere acompañándola ese día.

—Lucías muy confiada antes de salir a escena —dice Usopp al ver el rostro de su nakama en el televisor.

—Por supuesto, ya quería mostrar esta preciosura —responde con una sonrisa pícara—. Y no me refiero únicamente al traje de baño.

—¡Ahí! ¡Ya te tocaba, Nami! —menciona Chopper para que sus nakamas se centren en Nami y no en que no entendió esa última referencia. Todos continuaron viendo la filmación.

Las luces para la segunda prueba brillaban más que la anterior y un reflector acompañaba a cada participante durante el desfile para modelar su traje. Nami combinó su traje de baño con unos tacones naranjas que ya estaban posicionados para empezar a recorrer el plató. Cuando dijeron su nombre, Nami se sacó la bata de encima y la arrojó detrás suyo. El público la recordó de la prueba anterior pues, cuando vieron su figura desfilando, la aclamaron y llenaron la sala de aplausos y silbidos. Nami lucía un traje de baño bastante peculiar, aquellos que no la conocían no distinguieron las referencias y relaciones que mostraba la prenda con su persona, pero eso no incluía a los jueces. Como parte del concurso entregó una lista detallada del diseño de su bikini donde explicaba hasta el más mínimo detalle y la razón detrás de cada parte que conformaba la prenda.

—Los jueces debían leer esa hoja y ver su desfile a la vez. ¡Qué complicado! —dice Chopper asombrado del difícil rol que pueden tener los jueces.

—Seguro lo leyeron horas antes, Chopper. —responde Usopp—. De lo contrario no podrían calificar como es debido.

—Así es, esas hojas se las entregamos tres días antes de que empiece el evento —confirmó Nami. El pequeño reno se sintió engañado pero aliviado a la vez. —¡Ahí! Ese movimiento que hice fue de lo mejor, ¿no creen?

La cámara enfocó a una Nami que ya estaba posicionada en el centro del plató realizando las poses necesarias para que aprecien su cuerpo y el bikini. La navegante mostró un carisma que contagió a las personas para aclamar su nombre y irar su belleza. Después de caminar unos minutos en la parte central y dar un par de vueltas, se retiró de la vista del público hacia la parte de atrás. Nami estaba muy confiada, a pesar de no ganar la prueba anterior, no se desanimó para nada y continuó con lo previsto en su plan. Después de varios cambios de luces y ovaciones del público, concluyó la ronda del traje de baño. Fueron llamadas por el presentador a las tres mejores calificadas: Nami, Perona y Caty. Las seleccionadas debían de desfilar nuevamente ante el jurado acompañado de una explicación del bikini que modelan. La primera en salir a escena fue Perona, la princesa fantasma desfiló muy bien enseñando su traje gótico pegado a su cuerpo. Continúo Caty, quien desfiló con bastante gracia en el plató y explicó que el diseño de su bikini estaba relacionado a un sueño de pequeña. Finalmente llegó el turno de la navegante. Sus tacones naranjas empezaron a resonar en el plató, se movía con bastante destreza y profesionalismo hasta posicionarse frente al jurado.

«Mi traje de baño lo he diseñado en conjunto con una gran diseñadora y persona quien me ayudó a representar lo que es más importante para mí: Béll-mere, el dinero y las mandarinas. Esas fueron mis motivaciones para estar el día de hoy aquí y que tengan el placer de verme…. »

—Diste una gran explicación, pensé que lo arruinarías —dice Usopp en forma de broma pero pronto siente el puño de Nami en su cabeza.

—¿Cómo que arruinarlo?

—Ey, no es mi culpa. A veces te cuesta hablar de ti o de tu pasado —responde el francotirador cubriéndose la cabeza para no recibir otro golpe.

—Era algo necesario para el concurso. Solo tenía que practicar, es todo. Además… —hizo una breve pausa —. Me gustó mencionar a Bellmere-san de nuevo —una ligera sonrisa se dibujó en su rostro mostrando una expresión apacible. Sus recuerdos del pasado ya no le dolían, ahora los atesoraba con gratitud.

—¡Ya casi es hora de que suceda! —grita Chopper despertando a Nami de sus pensamientos.

—Es verdad….

El presentador llamó a las tres seleccionadas al centro del plató para dar el resultado final de los jueces: «Y la ganadora de esta prueba es….¡Nami!». La pelinaranja corrió a encontrarse con el presentador para recibir el premio de la ronda, también eran berries. «¡Muchas gracias a todos! Este premio realmente vale cada esfuerzo de la noche»

—De nuevo hiciste esa expresión extraña, Nami —dice Chopper cuando el zoom enfoca los ojos con forma de Berries de la navegante.

—Enfocaste mi felicidad, qué buen trabajo, Chopper. —El pequeño se sonroja ante tal cumplido hasta que un grito proveniente de la filmación lo trae de vuelta.

«¡No permitiré que te quedes con ese premio, gata ladrona!»

Nami voltea al escuchar su epíteto. Quien la había llamado era Caty que se acercaba con velocidad hacia donde estaba.

—¡Ese premio es mío! —reclama Caty mientras forcejea con Nami para quitarle el cheque que había recibido por ganar. —¿Cómo es posible que a ti te hayan dado esto y a mí no?

—No sé quién seas ni de dónde me conozcas, ¡pero no  permitiré que te lleves lo que es mío! —Nami sigue forcejeando hasta que gana la lucha y se aleja de Caty. —Si te vuelves a acercar a mí, tendré que atacarte.

—Inténtalo si puedes, niña.

La pelinegra se separa de Nami y entonces, sucede. Todo el público se queda atónito a lo que acaba de pasar, los jueces e incluso el presentador no comprendía nada.

—¿Esto es parte de la presentación? No tenía esto en el libreto —dice confundido.

En un segundo, Caty había revelado su verdadero ser, era Catarina Devon.

—¡Eh! ¿Acaso no eres de la tripulación de Kurohige? ¿Qué haces aquí? —dice Nami ocultando la sorpresa y el nerviosismo de tenerla enfrente.

—Al parecer eres la más hermosa aquí, así que tendré que llevarme tu cabeza.

—Así que el rumor que decía que coleccionabas las cabezas de jóvenes bellas era cierto. —Nami se siente halagada al confirmar esto, pero recuerda que está en peligro.

—Llevarme el premio tampoco me vendría nada mal.

Catarina señala con la mirada el cheque que sostiene Nami. La navegante cambia de actitud rápidamente y se posiciona para la batalla.

—Si vienes a llevarte esto, primero tendrás que derrotarme. —Nami recoge el clima tact escondido en la bata y se posiciona para la batalla.

Para fortuna de la organización del certamen, Catarina había ido sola, así que no tenían por qué preocuparse de una guerra. Los presentes seguían sin creer lo que estaba pasando, frente a ellos estaban dos jóvenes luchando por el cheque de la ronda. Ambas mujeres seguían en bikini y los movimientos en batalla remarcaban mucho el cuerpo de cada una.

—¡Qué hermosa que es Nami! —dice un joven del público cautivado por la belleza de la navegante.

—¡Tú puedes ganar, Nami! ¡Derrota a Devon!

—¡Sí, puedes hacerlo! ¡Eres la mejor!

Nami estaba concentrada en su contrincante, era una oponente difícil, pero no iba a permitir que llegara más lejos esa noche. Desde el plató, los gritos de la audiencia llegaron a los oídos de Nami, cuando volteó hacia los presentes vio a cada uno de ellos atento a sus movimientos y halagando su belleza y destreza en batalla. La pelinaranja se sintió mucho más confiada con el apoyo del público aunque no era necesario porque no estaba dispuesta a perder.

—Muy bien, terminemos con esto. ¡Zeus! —la pequeña nube salió del interior del clima tact al escuchar la voz de Nami. Se asustó al reconocer a Devon, pero lucía más preocupado por Nami.

—A tus órdenes, Nami —dice la nube con determinación y listo para ayudarle en batalla.

—Dark cloud Tempo —unas nubes negras salían del objeto y se posicionaron alrededor del cuerpo de Devon sin que se diera cuenta, estaba más pendiente de cómo decapitar a Nami.

—Aprecio tus halagos, pero lo último que debiste hacer es querer robarme dinero. ¡Thunder Bolt Tempo!

El ataque de la navegante cayó directamente en el cuerpo de su objetivo. Catarina cayó desde varios metros hasta chocar contra el plató. Los encargados de seguridad subieron con esposas de kairoseki y la arrestaron dejándola expulsada del certamen. Cuando se retiraron Nami seguía en el plató, exhausta pero abrazando el cheque por el cual luchó tanto. Unos gritos acompañaron su felicidad del momento, era el público quien había presenciado todo ese espectáculo y no tenía ni idea que Catarina era alguien de temer. Nami celebró junto a ellos lanzando besos al aire y saludando a todos los que gritaban su nombre.

—¡Qué buen final para la segunda prueba! —dijo Usopp emocionado por ver nuevamente la batalla —Sabíamos que le darías su merecido, ni nos preocupamos por eso.

—¡Te veías muy bien en batalla, Nami! Grabé cada movimiento y ataque tuyo —Chopper estaba orgulloso de su trabajo como camarógrafo —Mira, incluso se ve mejor en cámara lenta.

Nami vio como las luces iluminaban su rostro y parte de su cuerpo. Las ondas de su cabello se movían lentamente y su mirada reflejaba un brillo en los ojos.

—Sí que estabas dispuesta a defender ese cheque.

—No podía permitir que se lleve mi cabeza, ¡mucho menos mi premio! —responde indignada.

—Lo mejor es que el público pensó que todo era parte del espectáculo de la ganadora del traje de baño. —dice Usopp sin creer lo ingenua que puede llegar a ser la gente.

—Sin duda fue el mejor día y mi auge como camarógrafo —respondió Chopper orgulloso.

—Mejor continuemos con la siguiente prueba.

—Aguafiestas, las siguientes dos pruebas no fueron tan buenas como esta. —Una expresión de tristeza acompañó las palabras de la navegante. Chopper se sentó al lado de Nami, entendió la situación y lo complicado que fueron esas pruebas para ella.

—Lo sé, pero ¿quieres verlas o no?

—¡Claro que quiero verlas, tonto! —le da otro golpe a Usopp en la cabeza—. Sigamos con esto, Chopper.

 :sailboat:  • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •-[b]
[B]
[B]
[B]
[C] • ──────────────────────────── • 
[C] 
[IMG=0X0]
[C]
[C]H

Después del espectáculo de la prueba de traje de baño de anoche, la popularidad de Nami subió mucho en el certamen. Hoy tenía que lidiar con una prueba que le resultaba complicada: cultura general. Ella no es una persona tonta, ni mucho menos, solo que los datos y las fechas pueden confundirse fácilmente en su mente. Durante la mañana estuvo encerrada en su camerino repasando lo último. Nami sentía el cuerpo adolorido, así que no quería moverse del sillón hasta que fuera la hora de la prueba. Después de comer la ensalada e intentar relajarse se quedó dormida. Un golpeteo en la puerta la despertó, era la ayudante de producción para decirle que debe empezar a alistarse pues solo faltaba una hora para el inicio de la prueba. Nami respondió desde su lugar y se frotó un poco los ojos. Giró su cuerpo hasta que sus piernas colgaran del sillón y sus pies toquen el suelo. Entonces, se paró.

El cuerpo de Nami ladeó un poco, algo no estaba bien. Intentó pisar de nuevo y pudo ver cuál era el problema: su tobillo. La batalla de anoche le dejó algo más que buena fama, un esguince pronunciado en su tobillo izquierdo. Pensó que era parte del dolor por tantos movimientos y agitaciones durante el espectáculo, pero era algo más grave. Inmediatamente llamó a Chopper por el Den Den mushi y este corrió a su camerino a auxiliarla.

—¿Es grave? —preguntó intranquila.

—Está muy hinchado, debería descansar.

—No puedo hacer eso, Chopper. Debo salir en menos de una hora en tacones al plató.

—Vas a hacer que el tobillo empeore, Nami —el reno replicó enojado, estaba preocupada por su nakama. —Pero si quieres salir hoy, te puedo echar una crema efectiva para que no sientas dolor, pero eso no disminuirá la gravedad del esguince.

—Lo entiendo, pero lo necesito.

Chopper terminó de auxiliar a su nakama, pero no apoyaba la decisión de salir a escena. Sabía que Nami había practicado mucho esta noche, así tampoco quería arruinarlo. Se despidió de ella y cerró suavemente la puerta. Nami empezó a vestirse y a maquillarse, dejó los tacones para el final, no soportaba el dolor de caminar en ellos en su estado. Faltando diez minutos y con el último toque de colonia en su cabello, estaba lista para salir. Los tacones le esperaban en la puerta, Nami se subió en ellos y ahogó un grito de dolor. No iba a dejar que su noche fuera arruinada por su tobillo. Salió de su camerina a alistarse en la fila con las demás participantes. No quería demostrar que algo estaba pasando, ni mostrar debilidad alguna. Pese a sus esfuerzos de ocultar el dolor y su caminar un poco extraño, sentía las miradas de las otras chicas en ella. Nami podía escuchar murmullos y cómo señalaban su tobillo.

—Si alguien tiene algo que decir será mejor que lo diga ahora —dijo la navegante parándose frente a las demás y deteniendo la fila por un momento. Nadie replicó nada, así que continuaron. Nami sabía que tenía una actitud defensiva, pero aún en ese estado no iba a tolerar que hablen a sus espaldas.

Llegó al plató y el presentador ya estaba presentando la prueba de la noche. Nami se recostó en una columna del anfiteatro para reposar un rato. Aquella caminata de diez minutos sí había afectado un poco su movilidad. Retiró con cuidado el tacón de su pie dañado para sobarse levemente el tobillo. Lucía más inflamado de lo normal por el hecho de caminar en tacones y que el peso de su cuerpo descanse en el tacón. Además, el dolor empezaba a sentirse, algo que no debía de ocurrir después de haberse puesto la crema. Ya estaban en la participante número seis y le tocaba a Nami salir a escena. Se colocó nuevamente el tacón para estar preparada, pero no era así. El dolor iba aumentando, no recordaba lo que había estudiado en la mañana y el vestido era tan ajustado que le era difícil caminar bien. Ese vestido no era para hoy, pero tenía el largo perfecto para cubrir su tobillo inflamado.

Con esas dudas en mente y sudoración por el nerviosismo en su cuerpo, salió al plató mostrando una gran sonrisa aparentando que todo estaba bien. El público enloqueció al verla y gritó su nombre hasta que el presentador indicó que todos hagan silencio para la etapa de preguntas. Su caminar parece no haberse visto desde los asientos, pero los jueces sí lo notaron. Una de ellas, Yurii, le hizo un gesto con la mano preguntándole si se encontraba bien, a lo que Nami asintió. No convencía a la jueza, pero no podía hacer más en ese momento. El presentador continuó y empezó la ronda de preguntas.

—Señorita Nami, ¿qué opinas sobre que una Isla estuviese reinada por un Gyojin, siendo esto prácticamente una anarquía…

Nami no podía concentrarse por completo en lo que decía el presentador debido a su dolor. La primera pregunta se relacionaba con una experiencia personal, así que no tuvo mucho que pensar. La segunda pregunta también la conocía, esta vez tuvo mucha más dificultad para formar una respuesta completa. Llegada la tercera pregunta, el dolor era incontenible para Nami. No se había movido para nada de su posición, sentía que si se movía tan solo un poco iba a doblarse el tobillo. Respondió la tercera pregunta con lo poco que entendió. Su mente ya no  estaba puesta en responder al presentador, verse bien ante el jurado o el público, sino en quitarse los tacones e ir a recostarse en el sillón de su camerino.

—Sigamos con la cuarta pregunta: Si hubieses estado ahí para ayudar, ¿qué habrías hecho y cómo hubieses reaccionado ante la auténtica desaparición de una isla tan importante como lo fue Ohara?

—Yo….—. Nami no podía conformar una oración. Por otro lado, el jurado esperaba expectante la respuesta de la navegante.

—Señorita Nami, ¿se encuentra bien?

La visión de Nami empezó a nublarse un poco, sentía que su cuerpo perdía estabilidad. Su mente solo quería calmar el dolor del tobillo. Antes de responder la cuarta pregunta retrocedió un poco y en un mal movimiento pisó la cola del vestido. Nami cayó al suelo y el público se levantó de sus asientos dando un grito de susto y preocupación.

—Rápido, traigan una camilla —dijo la jueza Yurii desde su asiento.

—No se preocupe, estoy bien. Puedo continuar.

Nami intentó levantarse pero no podía. Cada vez que intentaba pararse su cuerpo tambaleaba y se caía a un lado. No podía hacer presión en el tobillo, no podía pisar ni caminar, no en ese momento.

—Esta vez no, Nami. Debes ir a descansar —. Yurii dio la orden de que se la lleven al camerino.

—No es así, ¡puedo seguir con esto! —replicó desafiante.

—¡Nami! ¡Deja que te lleven, necesitas descansar! —escuchó la voz de Chopper a lo lejos. Su nakam sonaba preocupado, tenía razón.

—Está bien, me iré por ahora —. Ella no quería esto, pero para continuar con las siguientes pruebas era necesario darse este descanso.

Nami fue llevada a la enfermería donde Chopper la acompañó y cuidó de ella. La enfermera, al igual que su nakama, dictaminó descanso médico de un par de días. Nami no podría realizar la siguiente prueba donde hablaba de sí misma y se presentaba ante el público con algunos datos curiosos y personales.

—Estarás indispuesta en lo que queda de esta primera parte, Nami —dijo la enfermera preocupada por su estado —. Si no hubieran intervenido ese esguince hubiera empeorado más.

—Fue descuidado de mi parte, lo entiendo. —Nami no podía ocultar su tristeza. No podrá participar en lo que queda de la fase, después de haberse preparado.

—No te preocupes, Nami. Con el puntaje que has acumulado hasta ahora, ¡ten por seguro que clasificas! —Chopper intenta animar a su nakama, además, es verdad lo que dice.

—Si mis cálculos son correctos, tu nakama tiene razón. Alcanzas a llegar a la segunda fase sin presentarte en la siguiente prueba.

—¿En serio?

—¡Sí, Nami!

—Así es, ahora preocúpate por descansar —ordenó la enfermera antes de retirarse.

La tercera prueba terminó con un sabor amargo para la navegante. Nami se recostó en la camilla de la enfermería e intentó descansar. Hizo mucho esfuerzo innecesario en el día maltratando su tobillo hasta el punto de no poder pararse. Cerró los ojos en aquella camilla y soñó con berries y mandarinas.

—Fue un día difícil para ti, ¿no? —preguntó Usopp aún sabiendo la respuesta.

—Nami se esforzó mucho, yo estaba muy preocupado por ella.

—Es por eso que el vídeo se corta en el momento en que cae en el plató

—¡Por supuesto! La salud de mis nakamas es primero. En ese momento apagué la cámara. —menciona Chopper tras recordar su nerviosismo del momento—. Además, no creo que a Nami le gustara que le grabara así.

Nami estaba cabizbaja. Como en automático, su mano fue hacia su tobillo izquierdo y lo frotó suavemente.

—Es verdad que pudo haber salido mejor, pero no me arrepiento —dio un largo suspiro—. Ahora ya me encuentro mucho mejor.

—¡Sí!, ya puedes caminar con normalidad, hace unos días te dieron de alta —gritó Chopper emocionado.

Nami sonrió tras escuchar las palabras de su nakama. Ahora ya podía caminar con normalidad y aquello solo fue un grato recuerdo de la batalla contra uno de los de un Yonkou. De todas maneras pasó a la siguiente fase, tal y como habían predicho en la enfermería.

—¡Muy bien! ¿Qué sigue? —preguntó Nami mucho más animada.

—Pues la cuarta fase, ya sabes. Sobre las preguntas de sí mismo y….—Usopp se vio interrumpido por su nakama.

—No quiero ver eso, yo no he participado allí.

—¿Eh? Pero si también lo grabé para ti —dijo Chopper haciendo puchero.

—Eso puedo verlo luego, ahora solo quiere verme a mí en la filmación.

—Entonces, ¿vamos a la quinta prueba? —preguntó Usopp confundido.

—¡Sí! —. Nami se acercó y abrazó a sus nakamas. —Vamos a ello.

 :sailboat:  • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •-[b]
[B]
[B]
[B]
[C] • ──────────────────────────── • 
[C] 
[IMG=0X0]
[C]
[C]H

Llegó la segunda fase del certamen Miss All Blue. Para esta etapa solo clasificaron cinco participantes, entre ellas Nami. La prueba que inaugura esta fase es muy sencilla, se trata de responder correctamente unas preguntas relacionadas a la isla de cada una de sus rivales. La contestación de estas preguntas no será como la etapa de cultura general, donde se acercaban al presentador y responden, esta vez será a través de un dispositivo. Las participantes se acomodarán en fila, todas a la vez, en el centro del plató. Se les asignará un asiento y una pequeña mesa donde estará una computadora. Las participantes tendrán una hora para responder todas las preguntas. Cada pregunta acertada tendrá un puntaje a favor, la ganadora será quien obtenga el mayor puntaje tras finalizar el tiempo.

Nami ya se encontraba mucho mejor tras su descanso médico. La prueba de esta noche le venía genial porque no se trataba de modelar, recrear un show y estar de pie; por el contrario, estará una hora sentada frente al público. Chopper acudió a su camerino antes de que empiece la prueba para revisar por última vez ese tobillo.

—La movilidad está mucho mejor y ya no hay hinchazón. ¡El reposo te hizo muy bien, Nami! —La navegante no podía estar más feliz de escuchar el diagnóstico de su nakama.

—No olvides grabar, seguro ganaré hoy. —da un pequeño guiño tras decir eso. Chopper sonríe cargando la cámara entre sus patas y desaparece detrás de la puerta.

—Muy bien, aquí vamos de nuevo.

Minutos después Nami sale de su camerino. Esta vez ya no hay una gran fila en el pasadizo, ahora solo son pocas. Vestida con unos tacones bajos, se dirige al plató. El presentador anunciaba cómo sería esta prueba y lo que conlleva para las participantes. Tras la explicación presenta a cada una de las seleccionadas y les pide sentarse en la silla donde indica su nombre. Nami se acomoda y espera a que sus compañeras hagan lo mismo. En la pantalla del computador solo se puede ver el logo del certamen y el fondo negro.

—A la cuenta de tres, empezará a correr el tiempo. Recuerden que tienen solo una hora para obtener el mayor puntaje. ¡Público! ¡¿Quién creen que será la ganadora?! —dice el presentador para encender el ambiente.

Las voces de la audiencia llegaban hasta el centro del plató. Todos gritaban distintos nombres. Ya no existía una favorita. Todas aquí estaban dispuestas a ser las ganadoras.

—¡Cuenten conmigo! 3 ... 2 ... 1…¡Empiecen!

La pantalla del computador quitó el fondo con el logo y lo reemplazó con un quiz de cien preguntas. Nami había estudiado las islas de sus rivales de manera general, así que estaba confiada de responder bien, lo que le preocupaba era el tiempo. Las primeras diez preguntas fueron medianamente sencillas, se dio cuenta que todas estaban desordenadas y no seguían una temática fija, sino podían estar salteadas. Sin desanimarse y manteniendo la compostura, continúo con las siguientes diez. Algunas de las preguntas requerían de mucho conocimiento histórico, no era su fuerte. Nami se demoraba mucho en estas preguntas, pero terminaba por responderlas correctamente.

El tiempo fue transcurriendo y solo quedaban los últimos cinco minutos. Nami iba por la pregunta noventa y cinco, a solo cinco preguntas de obtener la victoria. Hasta el momento no había fallado ninguna pregunta, lo cual era un consuelo para ella. Pero el tiempo se agotaba y si alguien terminaba antes que ella y tampoco se había equivocado, perdería la prueba. A un minuto de conseguir la victoria, Nami estaba en la última pregunta. Su racha de aciertos seguía intacta y esa era la razón de sentirse más presionada en esta pregunta. Releía una y otra vez para saber qué opción marcar. No quería cagarla. Cuando finalmente se decidió por una opción, se escuchó el sonido de un timbre. Una participante había terminado el quiz. En la desesperación y esperanza de que se haya equivocado su rival, Nami marcó la opción que creía correcta y la misma alarma volvió a sonar.

—¡Otra participante más que ha terminado! —dice con entusiasmo el presentador. —Solo nos quedan tres señoritas y diez segundos en la cuenta.Las participantes restantes marcaron las opciones que creían correctas y todas las alarmas sonaron antes de que el tiempo finalizara.  —¡Hemos concluido esta prueba! Ahora los jueces evaluarán sus respuestas y darán el veredicto final de las posiciones de cada una.

Nami estaba nerviosa, ella fue la segunda en hacer sonar la alarma, pero con la seguridad de que todo estaba bien. «Solo queda esperar a ver qué opinan de la primera participante. Ojalá haya errado alguna… » Después de unos diez minutos bastante tensos, los resultados fueron entregados por el presentador.

—La ganadora de esta prueba, quien obtuvo un puntaje impecable y lo hizo en el menor tiempo posible es…¡Nefertari Vivi! —la princesa se emocionó tras escuchar su nombre y se dirigió al presentador a recibir el premio de la prueba.

Nami fue nombrada por obtener el segundo lugar. Ella no recibió ningún premio además de la mención. Después de que todas fueron llamadas, no esperó un minuto más en el plató y se dirigió a su camerino. Estaba molesta consigo misma. La presión y el nerviosismo le jugaron en contra, sobre todo al incorporarse nuevamente al evento después de su ausencia en la prueba anterior. El público se preguntó dónde estaba la pelinaranja, pero ella ya se había resguardado de gritos que recordaban su segundo lugar.

 :sailboat:  • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •-[b]
[B]
[B]
[B]
[C] • ──────────────────────────── • 
[C] 
[IMG=0X0]
[C]
[C]H

—Esa salida tuya del plató fue muy dramática, eh. —dice Usopp codeando a su nakama.

—No me molestes, me enojé mucho. —Nami cruzó sus brazos y volvió a recordar el enfado antes de que lleguen sus nakamas.

—Igual tuviste un puntaje excelente, Nami. —dice Chopper intentando animar a su nakama— Además aún quedan unas cuantas pruebas más, ¡puedes hacerlo!

—Supongo que sí —Nami da un largo suspiro y se deja caer en el sillón de su camerino.

—¿Sabes en qué consistirá la siguiente prueba? —pregunta Usopp intrigado —En el folleto solo dice ‘Prueba de talento’.

—Vamos, Nami, seguro te han dicho. Quiero saber de qué va —Chopper está más curioso ahora que cuando entró.

Nami cierra los ojos y piensa un poco sobre lo que le dijeron esta mañana sobre la prueba de hoy. El enojo sigue nublando sus pensamientos.

—Solo recuerdo que mencionaron ‘escritura’.

—¿Escritura? —replican Usopp y Chopper al unísono.

—¡Eso dije! —Nami se tapa el rostro con la almohada y hace que no los escucha.

Chopper y Usopp se dan cuenta que su nakama necesita tranquilidad en este momento. Se levantan de los sillones intentando no hacer ruido y se dirigen a la puerta.

—Eh, Chopper, debería filmar también eso. —dice Usopp en voz baja—. Servirá para el detrás de cámaras. —ríe mientras incita a su nakama a que lo haga.

—¿De verdad? —replica Chopper en voz baja. Saca la cámara de su estuche y suena el click de encendido.

—¡Ni se les ocurra grabarme ahora! —gritó Nami desde el sillón conociendo las intenciones de sus nakamas, en especial de Usopp. Se retira la almohada y confirma lo que sospechaba. —¡Ya váyanse! Saldré en unos minutos. —dice lanzando su almohada contra la puerta y ahuyentando a sus nakamas.

—¡Te esperaremos en el jardín! —ambos salen corriendo de la habitación. No quieren que se desquite con ellos.

Nami se levanta del sillón y se dirige hacia el tocador para terminar de arreglarse y salir a encontrarse con sus nakamas. Posa su mirada en su yo del espejo.

—Esto aún no ha terminado.

• ──────────────────────────── •

 :sailboat:  • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •-[b]
[B]
[B]
[B]
[C] • ──────────────────────────── • 
[C] 
[IMG=0X0]
[C]
[C]H

¡Gracias a quienes han leído el blog!

Ha sido un proceso largo de escritura

para interpretar el personaje de Nami.

Espero hayan disfrutado la lectura 🧡

#MissAllBlue

• ──────────────────────────── •

⛵ • Mi travesía por el certamen Miss All Blue •-[b]
[B]
[B]
[B]
[C] • ──────────────────────────── • 
[C] 
[IMG=0X0]
[C]
[C]H
Likes (455)
Comments (4)

Likes (455)

Like 455

Comments (4)

Yo con insomnio pero con este fic para aligerar la noche en vela, perfección :smoking: :sparkles:

Read more
1 Reply 04/03/23
    Community background image
    community logo

    Into •One Piece•? the community.

    Get Amino

    Into •One Piece•? the community.

    Get App