⚜ Impera ⚜ Capitulo 4 ⚜

⚜⚜⚜⚜⚜⚜⚜Impera⚜⚜⚜⚜⚜⚜⚜

⚜⚜⚜⚜La escuela de la amistad⚜⚜⚜⚜

Los días pasaron, mis maestras iban y venían, pasaba tiempo con Cadence, Shining y Flurry quien cada vez confiaba más y más en mí, a veces me preguntaba ¿De verdad había estado tan sola todo este tiempo? A veces parecía como si fuera su única amiga.

Finalmente, después de unos meses llegó la orden de Twilight, ya podía salir del cuarto y desplazarme libremente… Solo por el interior del castillo. No era lo que esperaba, era algo, al menos ya no estaba limitada a un solo cuarto, pero me exasperaba, a tal punto que la siguiente vez que llegó Starlight a darme clase después de la noticia le pregunté:

-Maestra Starlight

-¿Qué pasa Cozy? – preguntó levantando los ojos del libro

-¿Cuando tu estabas siendo reformada te mantuvieron en confinamiento?

-Pues no, no lo hicieron – respondió Starlight mostrando un rostro pensativo –Pero, cuando empezaron a reformar a Discord lo tenían amenazado de volverlo piedra apenas intentara hacer algo. Mira Cozy no lo tomes a mal, Twilight solo hace lo que cree es mejor.

-Sí, supongo es verdad – le respondí antes de que resumiéramos la clase.

El tiempo siguió pasando, disfrutaba los ratos con Cadence debo itirlo, actuaba como la madre que nunca tuve, con el tiempo también comencé a disfrutar estar en compañía de Flurry.

Con quien más disfrutaba estar, sin embargo, era Shining, el unicornio me explicó muchas cosas interesantes, me llevaba a los cuarteles y me enseñó estrategia, aprendí muy rápido, aparte de eso jugaba ajedrez conmigo. Cadence me tendía a enseñar cosas más suaves, sin embargo, al notar que sí estaba siendo cercana a su hija y mis avances con Shinning y mis maestras comenzó a introducirme a la política junto a Flurry, lo cual fue todavía más interesante.

Estaban preparando a Flurry para reinar algún día y a mí para ser su mano derecha, su compañera, consejera y amiga, claro que en lo profundo yo tenia otros planes.

No creo que haga falta recalcar que estas clases extras no estaban aprobadas por Twilight, pero tampoco eran asunto suyo, eran asunto de mi nueva familia.

Al pasar el año Twilight finalmente dio la orden de que se me permitiera salir del castillo a voluntad, con la condición de que siempre hubiera quien me cuidara cerca, sin embargo, mi educación continúo siendo desde el castillo por otro año más. Pasados dos años se me informo que comenzaría a tomar clases en la escuela de la amistad de la ciudad de cristal. Me percaté que ya estaba todo listo para reintegrarme a una vida más normal pues aparentemente Starlight se había encargado de abrir escuelas a todo lo largo de Equestria y el imperio, siendo las tres más grandes la de Ponyville, Canterlot y la Ciudad de Cristal.

Mis maestras dejaron de ser directamente las mane six y comenzaron a ser aquellas en el recinto del imperio, ponis que en su mayoría no conocía, sin embargó, bien informadas de mí. No fue de mi sorpresa tampoco que este punto de la ciudad era el más diverso en cuanto a criaturas, sin embargo, no al nivel de la escuela en Ponyville.

El primer día Cadence personalmente me acompañó hasta la escuela, ahí, para mi sorpresa, se encontraba Ocellus esperando. Al verme su rostro cambió un poco, mantuvo la compostura, pero, se veía nerviosa, notaba su desconfianza, a pesar de eso intentó ser amable. Ocellus sonrío y apenas estuvimos suficientemente cerca dijo:

-Bienvenida Cozy, te esperábamos, Twilight nos informó que ibas a estudiar con nosotros.

-Cuanto tiempo ha pasado Ocellus se ve que tus clases valieron la pena – le respondí mostrando una sonrisa.

-Sí, Twilight me confió la dirección de una escuela, no llevó mucho ejerciendo, ha sido toda una experiencia. Pero bueno, serías tan amable de seguirme Cozy te mostrare el lugar.

Fue entonces que me despedí de Cadence y entré a las instalaciones, eran bastante similares a las de Ponyville, esta coincidencia era probablemente intencionada. La arquitectura interior también me recordaba a la otra escuela, lo que cambiaba era la distribución.

En esta escuela de la amistad principalmente había Ponis de cristal, changelings y Jacks, puesto que estos eran los más cercanos al imperio geográficamente hablando. La dirección de la escuela estaba bajo los cascos de la Changeling Ocellus. No me sorprendió de sobremanera pues algo me había comentado ya Pinkie al respectó, sin embargo, no esperaba la escuela que manejara fuera justo la del Imperio de Cristal, y era alguien más a quien soportar del pasado, a pesar de su agridulce bienvenida.

Después de mostrarme la mayor parte de la escuela me dejó en mi primera clase y se retiró, entré al salón recibiendo miradas de todos, algunas indiferentes otras de sorpresa y rechazo, me juzgaban. A pesar de esto, me presente alegre y fui al que sería mi asiento.

Desde entonces empecé a tener clases con horario normal, sin embargo, aproveché en gran medida mi caminata diaria, para observar lo que pasaba a mi alrededor.

Cerca de los edificios pertenecientes a Equestria, como la embajada o el cuartel de la guardia Equestriana vi carteles, a veces grafitis, ninguna de las dos cosas duraba demasiado ahí. Leí pocas de estas cosas, frases como "fuera de nuestras tierras" "Independencia para el imperio" "queremos nuestro referéndum" algunos ponis de cristal veían la presencia Equestriana como una ocupación

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Al principió estuve algo aislada de mis compañeros, los migrantes de Equestria en especial me veían con rechazo. La mayor y más agradable sorpresa en particular fue con los ponis de cristal, no parecía importarles, no parecían dar importancia a mi pasado, fue entre ellos que comencé a hacer amistades.

La primera amistad que hice fue una pegaso nativa del imperio que conocí en clase llamada Angelina Niebieski. La conocí el primer día, el cual fue bastante incómodo para mí, pues me quedo claro que varios me habían visto o me conocían de algo.

Pronto supe porque, cuando tuve los libros de las materias que llevaría, los ojeé, y descubrí que estaba incluida, por supuesto ahora que era parte de la historia de los elementos de la armonía me habían puesto en el libro. Era obvio porque muchos de ellos susurraban a mis espaldas, todos menos los ponis de cristal. Fue en receso que se acercó a mi esta pegaso de cristal, su pelaje de un resplandeciente color lila y su crin de un purpura brillante.

-¿Cozy Glow no? Soy Angelina, un gusto – me dijo la pegaso después de observarme por un momento sonriente, me asomé ligeramente a un costado para ver su cutie mark, era una jarra plateada con uvas marcadas en su fachada, la jarra estaba medianamente inclinada, dejando caer una cascada de vino

-Sí, esa soy yo, me da gusto saber que no todos me ven extraño – dije devolviendo la sonrisa.

-No te preocupes mientras te rodees de ponis de cristal, no recibirás muchas de esas miradas.

-¿A que te refieres?

-A la mayoría de ponis de cristal no les importa los problemas que haya tenido Equestria.

-Es bueno saber eso, hace un poco más fácil el camino que debo recorrer.

-¡Oh es verdad! Escuche que estas en una especie de reformación.

-Bueno, no sé. ¿Le puedes llamar reformación a estar encerrada en un castillo por básicamente dos años? – le dije dejando salir una risa

-Suena más a un encierro domiciliario – dijo ella riéndose conmigo.

-Dime que significa exactamente tu cutie mark – le pregunté

-Oh, mi familia es burguesa, poseemos viñedos en las afueras de la ciudad un negoció que ha pasado por generaciones, toda la familia tiene cutie marks referentes a la producción de vino, aunque últimamente los equestrianos se llevan la mayoría de oportunidades de negocios. – me respondió

Desde entonces comenzamos a platicar, compartíamos algunas clases, pero en general me buscaba en los descansos, fue por ella de igual forma que fui acercándome a los grupos de ponis de cristal. Logre ganarme unos cuantos amigos entre estos ponis, sin embargo, me costaba mucho más acercarme a cualquier otra criatura. Los Equestrianos me veían con malos ojos, los Jacks y Dragones un tanto ajenos a la cultura poni se mantenían mayormente con los suyos, los changelings intentaban mezclarse más, aparentemente eran más aceptados por los ponis de cristal que las demás especies, los hipogrifos eran escasos y no parecían llevarse del todo bien con los ponis locales, sin embargo, con los grifos parecían ser muy afines.

A la única que seguí viendo un tiempo aun en la escuela fue a Fluttershy, pues Twilight no le había permitido darme una mascota tan pronto como a ella le hubiera gustado, así que apenas la había podido elegir, un lindo colibrí cuyo color de plumaje me recordaba al de mi crin. Por esta razón Flutter siguió viniendo una vez a la semana, para ayudarme a entrenarlo y a comunicarme con mi nuevo amigo.

En la escuela las cosas avanzaron poco a poco, mis nuevos maestros se fueron acostumbrando a mí, aunque noté que algunos de ellos parecían ponerme especial atención. Después me enteré que esto se debía a que Ocellus les había pedido específicamente que me vigilaran lo mejor posible, le mantuvieran informada de todo progreso que tuviera.

No le tome demasiada importancia, era perfecta actuando y mostrando lo que quería que vieran, era molesto, pero nada con lo que no pudiera lidiar. Mis clases fueron en su mayoría aburridas, información que me pareció básica, los estudiantes de mi edad, aparte de Angelina, eran muy aburridos, tal vez por el hecho de que no compartían mi edad real. la monotonía de la escuela se termino aquel día mientras caminaba por el patio con Angelina, fue entonces que la noté...

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