
MENSAJES DEL MÁS ALLÁ
A todo el mundo, hoy en día le encantan las redes sociales. La mejor manera de comunicarse con las
personas que aprecias, gente que está lejos y por supuesto… Alardear de tu vida, por más insignificante
que sea.
Pues en las redes todo el mundo aparenta lo que no es y el que tiene, no desaprovecha la mínima
oportunidad en hacerlo saber a los demás con poca suerte. Sin embargo, este no es el caso.
Hoy hablaremos de JongHo, un chico que tenía un buen grupo de amigos en la universidad donde
estudiaba. Todo el mundo le apreciaba, desde los alumnos menos populares hasta los que eran
influyentes y capaces de hacerle un gran favor en sus estudios.
Tenía su grupito de amigos del mismo nivel que el suyo, compartían de todo en su chat de amigos en
Kakao Talk; JongHo era el que mandaba los memes y stickers graciosos, reviviendo el chat. Saludaba a todos antes de irse a estudiar, les mandaba imágenes de piolín con marca de agua para hacerlos reír.
Por eso varios lo tenían agendado como “Payaso”. Era el alma de la fiesta, pero, así como los hacia reír, nadie sospechaba de lo que sufría por dentro…
Hace varios meses le habían diagnosticado problemas en su corazón, sufría de cardiopatía isquémica.
Nunca se lo conto a nadie, y no porque no quisiera hacerlo. Pero es que nadie lo tomaba enserio; cada
vez que intentaba hablarlo le decían que no hablara de cosas tristes, que él no era así.
Jamás pudo decirlo y la frustración junto con la ansiedad de decirlo y recibir consuelo de alguien, no fue posible. Sus amigos le ignoraron, aunque cuando al fin decidieron escucharle esa tarde de octubre, bajo la lluvia… el murió de un infarto fulminante enfrente de ellos.
Los presentes solo le miraron caer del otro lado de la calle, frente al parque donde se reunían siempre a hablar de todo y reír gracias a JongHo.
Fue el trágico final de la vida de un muchacho… pero el inicio del infierno de sus amigos…

Nadie volvió a mencionar el tema, sus amigos decidieron utilizar el
perfil de JongHo como un tributo a su memoria.
Su mejor amigo WooYoung se sentía mal. Nunca había querido escuchar a su mejor amigo hablar de eso.
En realidad, jamás pensó que el muriera de esa forma, ¡Por Dios, era menor que su persona!
¿Como podía saberlo? JongHo se veía más saludable que el mismo. Solo que ahora estaba muerto, bajo
tierra, siendo comida de gusanos y nunca pudo ayudarle. Miraba los chats de conversaciones con JongHo, las ultimas que tuvieron.
“¿Qué piensas de la muerte?”
“¿A qué viene esa pregunta? Tú no eres de los que hablan de estas cosas amigo, se
siente raro”.
“Lo siento, ya no hablare de eso
jamás, no después de mañana”.
¡Que acertado había sido!
Ahora ya no existía… no pudo decirles el mismo, de su enfermedad. Empezó a llorar, pero un mensaje le saco de su tristeza y la reemplazo por miedo…
“Hola”
Ese mensaje había llegado del chat de JongHo , se levantó de su cama asustado, aun así, respondió.
“¿Es alguno de los padres de Ho?”.
“Que gracioso Woo, sabes que soy yo animal. JAJAJAJAJA”
Así lo llamaba su mejor amigo fallecido. Casi tira su celular, esto no era gracioso.
“No es gracioso, deberías de respetar la memoria de JongHo ”
apareció escribiendo en el chat…
“Estas de chistoso Woo, ten cuidado mañana. Creo que San se romperá el brazo mañana.”
“¿Quién eres? ¿Por qué tienes el numero este?”.
“Buenas noches, WooYoung”.
Al día siguiente WooYoung no podía creerlo aún, no tenía sentido que JongHo le estuviera hablando si el ya estaba… muerto. Caminando por los pasillos de la universidad se encontraba, directamente a la mesa donde sus amigos se agrupaban. Enfrente de él pasando San, el chico que le gustaba; todo paso tan
rápido que no lo vio venir, solo las palabras que le mando “JongHo”.
San había tropezado por sus cintas y caído por las escaleras del pasillo, rompiéndose el brazo.
“¿Vez? Te dije que tuvieras cuidado, ahora vete a clases o se te hará tarde”,
Salió prácticamente corriendo.
¿Alguien lo vigilaba? ¿Cómo sabían dónde estaba? Si esto era una broma, se estabapasando de control.
Agitado entro a su salón recibiendo otro mensaje “El maestro Park morirá de un infarto hoy”.
Miro hacia al frente donde estaba, no era para nada viejo. ¿Cómo podría morir por eso?
—Bueno clase, abran su libro en la página 105. — todo iba normal hasta que el maestro cayó abruptamente, y fue a dar directo al piso por un infarto.
“Te dije. Ahora cuídate más porque es posible que pronto sea tu turno… y no quiero que mueras sin
decir lo que sientes. Atentamente JongHo.”
Salió corriendo de la universidad, no sabía que más hacer estaba asustado. Pero se llevó una sorpresa al ver a sus otros tres amigos en la puerta de su casa.
— Algo raro nos está pasando…— hablo MinGi.
— Nos están cayendo mensajes del número de JongHo. — YeoSang menciono— Se que tal vez suena imposible.
— ¡Pero no es mentira! — YunHo grito llorando casi. — Ya estoy harto de recibir sus mensajes, quisiera que dejara de molestar, ¡JongHo está muerto! No puede decidir quien vive y muere. ¿Por qué nos pasa esto?
— YunHo cálmate… no creo que sea bueno que te alteres.
— ¡No me importa!—YunHo tiro su teléfono al momento que un mensaje.
“Ten cuidado con lo que dices YunHo No sabes de donde vendrá el fin”.
— Yo me largo. — dijo, pero un camión le paso encima matándolo.
Nadie podía creer lo que
había pasado.
Los mensajes empezaron a caer sin control “Se los dije”, “No pueden huir de su destino”, “Nadie se ira sin decir lo que pienso”.
Entraron corriendo a la casa de WooYoung, pero inmediatamente la luz empezó a fallar, la lluvia
comenzó a caer. Podían sentir el aire muy pesado, y unos pasos acercarse a los tres amigos haciendo que las cosas a su alrededor caían hasta romperse… no dejaban de caer los mensajes en los celulares de los tres.
“No pueden escapar de mi”, “No pueden”, “Van a morir como yo”, “¡Nadie los escuchara!”
La puerta del cuarto fue WooYoung fue abierta, dejando entrar a lo que sea que les escribía.
— Esta adentro…— Woo dijo casi llorando. — Esa cosa esta con nosotros.
Otro mensaje cayo en el celular de los tres, “Vean hacia arriba, los estoy viendo”.
MinGi y YeoSang vieron hacia arriba, solo para dar un grito de terror; Woo permaneció con la cabeza gacha, solo escuchando el crujir de los huesos
pertenecientes a la caja torácica de sus amigos.
Ambos cayendo al piso con sangre saliendo de sus ojos, de sus oídos y nariz. El solo se puso a
llorar con el gran miedo que sería el siguiente, pero no fue así.
Había un mensaje en su celular…
“Aun no es tu tiempo amigo… mientras estes vivo nunca dejare de escribirte. Nunca tendrás paz”.
WooYoung grito con todas sus fuerzas tirando el celular contra la pared, quebrándolo y acto
seguido se desmayo por todas las emociones vividas.
Paso un año después de ese incidente, WooYoung pudo salir del psiquiátrico en el que lo habían
internado luego de eso. Se recupero en teoría.
No podía ver un celular por el mismo trauma, pero había empezado a trabajar, estaba empezando su nueva vida. Compro un celular nuevo, no tenía ni un solo o registrado.
Así que empezó a descargar todas. Ya era alguien nuevo, lo demás había quedado en el pasado.
Se termino de descargar la aplicación y ya había recibido un mensaje…
“Soy JongHo, este es mi nuevo número…”




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